Como
sabéis, acabo de romper con el que fue mi primer novio coreano y qué mejor forma de superarlo
que compartiendo aquello que a mí me está resultando útil, por si a alguien más
le sirve. Esto lo estoy escribiendo con los “sentimientos en directo”, por
decirlo de alguna forma, y aplicando pequeñas cosas que realmente me están
ayudando con el deseo de que si hay alguna chica que esté pasando por lo mismo
que yo en este momento pueda encontrar algo de consuelo o, al menos, sienta que
alguien la comprende.
Esta entrada va dirigida a las congéneres que acaban de terminar una relación con un chico coreano, pero, en realidad, estos consejos podrían aplicarse a cualquier sexo y a cualquier tipo de ruptura, más allá de los coreanos, por lo que, si alguien más puede beneficiarse de estos consejos, estoy más que contenta. Sin embargo, hay algunos puntos que sí que son específicos para personas relacionadas con la cultura coreana que he dejado para el final.
Esta entrada va dirigida a las congéneres que acaban de terminar una relación con un chico coreano, pero, en realidad, estos consejos podrían aplicarse a cualquier sexo y a cualquier tipo de ruptura, más allá de los coreanos, por lo que, si alguien más puede beneficiarse de estos consejos, estoy más que contenta. Sin embargo, hay algunos puntos que sí que son específicos para personas relacionadas con la cultura coreana que he dejado para el final.
- Corta todo vínculo con esa persona. Bloquea a la persona en el Kakao y bórralo de las redes sociales en las que lo tengas para evitar torturarte acosándolo (que sabemos que lo vas a hacer). Borra fotos, tira regalos que tengas de esa persona (por supuesto, especialmente anillos) y borra todos los recuerdos que tengas, ya que si no lo haces (por eso de “ay, es que me da pena”) seguirás aferrada a una esperanza del pasado y va a acabar haciéndote daño. Borra su número y bórralo todo sin dejar rastro. Y, obviamente, no vuelvas a contactar con él.
- Corta el contacto con amigos o familiares de la persona. Muchas veces, aunque no es su intención, las personas que están entre ambos pueden ser muy perjudiciales a través de comentarios o actitudes que adopten, especialmente si se trata de la familia de él. Puede que tengáis buena relación y que os tengáis cariño, pero ¿con quién crees que van a posicionarse esas personas? No seas ingenua y evita más problemas o una más lenta vuelta a tu vida.
- Intenta conocer a gente nueva. Especialmente si eres una persona extrovertida o sientes que quieres hacer algo divertido, conocer gente nueva puede ser una actividad muy interesante. Nunca sabes quién puede convertirse en buen/a amigo/a y puedes sentir un gran bienestar si encuentras gente maja. Cada persona tiene algo valioso en su interior que puede resultar muy enriquecedor y no tiene precio encontrar a alguien que sea similar a nosotras y nos entienda… ¿por qué no tratar de buscar más amor en nuestra vida con estos amigos en potencia aún desconocidos?
- Dedícate tiempo a ti misma: haz lo que te apetezca hacer este día, desde lo más banal como darte un buen baño de espuma con agua caliente en la bañera (que ojalá fueran todas las cosas banales así de placenteras) hasta ir a hacerte las uñas o a que te den un masaje. Algo que sea para tu bienestar físico o psicológico. Y si puedes llevar a cabo esas actividades totalmente desconectada del móvil, incluso mejor (a no ser que lo necesites por motivos laborales, por ejemplo… tampoco queremos aumentar aún más el desempleo). Sentirse cuidada y libre no tiene precio.
- Sal a caminar escuchando música. Dedícale todo el tiempo del mundo a tu caminata, sin ninguna prisa, y disfruta de tus canciones favoritas mientras vas observando el paisaje exterior. Además de entretenerte con las vistas y de animarte con la música, estás haciendo ejercicio sin apenas darte cuenta y eso te va a ayudar a sentirte bien de forma natural por el simple hecho de estar moviéndote… ¡y hasta puedes adelgazar!
- Deja de pensar en esa persona o lo que pudo haber sido. Probablemente esto sea lo más difícil, ya que, especialmente las mujeres, le damos vueltas a todo hasta volvernos locas. Si ya se ha terminado, ¿qué sentido tiene seguir pensando en algo que no va a cambiar? Si un jarrón se nos cae de la repisa y se transforma en mil pedazos, ¿vamos a poder arreglarlo por más que pensemos en ello? No (a no ser que lo compartamos en Facebook y pongamos “amén” =P), el jarrón ya no tiene solución, así que vamos a barrerlo del suelo, que no nos cortemos con los pedazos afilados, y vamos a comprar uno nuevo.
- No culpes a nadie ni almacenes rencor dentro de ti. En esta vida hay tantos puntos de vista como granos de arena en las dunas del desierto y el hecho de que no te hayas podido entender con alguien no quiere decir que haya algún culpable. Tú has hecho lo que tenías que hacer siendo tú misma y permaneciendo fiel a quien eres, e igual ha hecho esa persona, así que no te lamentes porque es algo que probablemente tenía que pasar así y trasciende de vosotros. Además, el rencor es un veneno que destruye tu alma, así que no te empeñes en preparártelo y bebértelo tú sola.
- Llora todo lo necesario. Llora hasta que se te atranque la nariz y tus ojos queden como un tomate apuñado (rojos, pequeños y adoloridos). Permítete expresar toda la tristeza que llevas dentro hasta hundirte en la miseria. Piensa que una vez toques fondo, todo lo que queda es remontar. No sé por qué extraño motivo hasta que, personalmente, no he llegado a ese punto de verlo todo negro y llorar todo un mar no he sido capaz de recuperarme del todo. Pero una vez llegado a ese punto siempre he resurgido de mis cenizas con más fuerza que nunca. Y sé que lo mismo va a pasar contigo. Sácalo todo de dentro, porque no necesitas tristeza en tu nueva vida.
- Ponte guapa. Esto es algo que, por instinto, todas sabemos que nos hace mucho bien. Date una buena ducha, saca tu ropa favorita del armario, hazte un peinado bonito y maquíllate para sentirte la chica más guapa del mundo. Por supuesto, no necesitas hacer todo eso debido a que la verdadera belleza está en el interior y, sobre todo, en ser auténtica, pero a veces nos ayuda sentirnos externa y estéticamente más guapas. Después de haber llorado toca borrar las ojeras y resaltar el color de nuestra sonrisa. Tómate como un juego creativo la actividad de ponerte guapa y sonríe: ¡has sobrevivido, olé tú!
- Sal a la calle. Aunque no tengas ningún motivo especial, sal fuera de casa a que te dé el aire. Aunque estés sola y vayas a andar sin rumbo como las locas, es preferible eso a quedarte en casa sin hacer nada y atormentándote. Si vives cerca de la playa, de un bosque, de un río, de un parque o de cualquier sitio que esté en la naturaleza, ve allí sin dudarlo. La naturaleza siempre reconforta con su grandeza, sus maravillosos colores, su frescor, su riqueza y toda la vida que alberga… ¿Quién no se anima disfrutando de tal privilegio (y gratis)?
- Cómprate algo. Si vas a empezar una nueva vida, ¿qué mejor forma de simbolizar este hecho que comprar algo que sea tan bonito o bueno como lo va a ser tu vida a partir de ahora? Te mereces un gran premio por haber abordado con tanta madurez y sabiduría algo que es tan duro y complicado de pasar. ¿Cuál es tu prenda favorita? ¿Eres de las coleccionistas de zapatos o más bien de pañuelos o bolsos? Ve a tus tiendas favoritas y no te cortes en comprarte lo que te guste, ¡te lo has ganado! Verás como cuando te toque estrenarlo, sin importar cómo esté tu estado de ánimo, vas a seguir disfrutando de uno de los pequeños placeres de la vida.
- Intenta no pasar mucho tiempo sola. Sal con amigos, haz planes con tu familia, saca a pasear a tu perrito, rodéate de tus gatitos, queda con tu vecino… pero intenta sociabilizar. Somos seres sociables por naturaleza y necesitamos compañía, por lo que el simple hecho de estar compartiendo tiempo puede resultar muy terapéutico, incluso sin necesidad de hablar de cómo te sientes. Es más, muchas veces escuchar sobre la vida o los problemas de otros nos puede ayudar mucho a desconectar de nuestras paranoias y a sentirnos bien tratando de echarle un cable a esa persona que está con nosotros. Con esto no estoy diciendo que desesperadamente intentes estar acompañada en todo momento (sobre todo porque es imposible). También necesitas momentos de soledad para asimilarlo todo. Intenta buscar un equilibrio con el que te sientas bien, que es lo más importante, pero no olvides que también está bien dejarnos ayudar de vez en cuando (y seguro que a nuestro alrededor están contentos de poder hacerlo).
- Busca una nueva afición o apúntate a un curso que siempre hayas querido hacer. ¿Por qué no? ¿A qué estás esperando? Ahora es el mejor momento para llevar a cabo todos esos proyectos que se han quedado atrás y que ahora pueden ayudarte a llenar tu tiempo y canalizar tu energía hacia algo constructivo. ¿Quieres aprender a cocinar algo de la gastronomía coreana o tienes curiosidad por probar clases de taekwondo? Seguro que este es el momento en el que más puedes disfrutar este tipo de actividades. A mí me ayudó mucho apuntarme a un curso de danza del vientre para superarme a mí misma y conocer tanto a una profesora como a compañeras estupendas, y creo que fue una de las mejores decisiones y que más me ayudó. Estaba súper contenta, salía a tope de energía, me fui liberando de la cárcel en la que yo misma me tenía debido a mi timidez y mi autoestima creció a pasos de gigante. Anímate a hacer algo que te guste y verás como no te arrepientes.
- Date un capricho. ¿Hay algo que te encante comer, pero siempre te prives de hacerlo porque es muy caro o tiene muchas calorías? ¿Hay alguna actividad que nunca hayas probado a hacer porque es muy loca o nadie se ha decidido a acompañarte? ¡Ahora es el momento! Haz cualquier actividad que te saque de tu rutina habitual y sientas que es algo especial. Estás de celebración y tienes que consentirte.
- Haz un viaje. Esta actividad es especialmente recomendable si el lugar en el que vives tiene recuerdos físicos con esa persona que estás tratando de olvidar. Si en tu casa ves su cepillo de dientes y te entra depresión (ahí tienes la culpa tú por querer torturarte tontamente, ¡tira eso ahora mismo! Que además de todo son puros gérmenes, puaj), ¡vete de ahí! Cambia de ciudad, cambia de provincia e, incluso de país si puedes permitírtelo. Vete aunque sea un corto período a ver mundo y a cambiar de aires para volver con otra visión del mundo. Date un tiempo para asimilar la ruptura sin tener que sufrir con recuerdos repentinos al pasar por cierto lugar y recordar que ese día fue cuando te cogió de la mano por primera vez o donde discutisteis por última vez. Explora otros sitios y, de paso, date tiempo para afrontar en un estado más óptimo cómo mirar esos recuerdos sin que te produzcan dolor.
- Sé positiva. Dicen que cuando una puerta se cierra se abren otras… y yo te garantizo que además de puertas se abren ventanas, paredes y hasta el tejado y el suelo de la habitación en la que estás. Piensa que va a venir algo mejor porque te lo mereces. Es así de simple. Esa historia no ha funcionado porque ahí fuera hay otra persona que congeniará mucho mejor contigo y será infinitamente más compatible contigo, te entenderá y te querrá como tú quieres que te quieran. Y, por supuesto, tú tienes que dar lo mejor de ti para corresponder a esa persona y ser felices juntos. Pudiendo pensar en lo que está por venir, ¿para qué amargarse con algo que no valió tanto la pena? Mejor haz algo constructivo: escribe una lista con todas tus cualidades positivas y percátate sinceramente de todo lo que vales. Quiérete mucho para que la persona que venga pueda ver tu auténtico valor.
- Abstráete. Engánchate a una serie larga, de esas con varias temporadas y un montón de capítulos largos en cada una de ellas, o descárgate películas (especialmente de acción, terror, misterio, ciencia ficción o policiacas, pero NUNCA románticas… no por ahora). Los medios audiovisuales tienen la magia de teletransportarnos a otras épocas, ponernos dentro de otras pieles, hacernos pasar por todo tipo de experiencias y permitirnos vivir otras vidas diferentes a las nuestras. Esto nos puede ayudar mucho a desconectar de nosotras mismas y hacernos más liviana nuestra carga al no estar las casi 24 horas del día dándole vueltas a la cabeza
- Reflexiona sobre ti misma. Es un buen momento para sentarte a mirar desde el atalaya de tu vida qué es lo que has logrado hasta ahora y qué objetivos quieres llegar a alcanzar. Si te paras a analizar todo lo que has conseguido hasta este momento te darás cuenta de todo lo que vales y debes compensarte por haber llegado tan lejos. Reflexiona sobre cuáles son tus aspiraciones en la vida, cuál es tu vocación o llamada interna y traza un plan para conseguir llegar a ese momento que te pueda traer la plena realización personal. Y si aún no tienes claro nada sobre este tema, ¿qué mejor momento para hacer un alto en el camino y escuchar lo que tú misma tienes que decirte? Piensa que hay muchas cosas que realmente merecen tu atención y te conciernen de una forma mucho más seria debido a que se trata del rumbo de tu vida… no pierdas tu tiempo con pensamientos que ya no tienen sentido y que, además, son externos a tu persona; colócate en el primer puesto de tus prioridades.
- Mantente ocupada. Si por temas, por ejemplo, laborales tienes que, sí o sí, centrarte en otras cosas y destinar energía mental a solucionar los asuntos que se vayan presentando, sufrirás menos en el tema sentimental, obviamente. En este momento el trabajo puede ser tu mejor aliado. Y si no lo tienes, no temas en meterte en todos los proyectos que puedas abarcar. Recuerda que la mente siempre encuentra mayor satisfacción cuando crea algo y se abate sin remedio cuando se queda lamentándose repetitivamente por algo que ya ni existe.
- No escuches ninguna canción triste. Huye de todas las baladas que nos persiguen en el preciso momento en el que saben que nos hemos quedado sin pareja (cabronas sin piedad), del tipo OST de dramas coreanos cuando a la chica a dejan, la despiden del trabajo, la echan de su casa por falta de dinero, se pelea con su mejor amiga y encima de que está lloviendo y no tiene paraguas sufre un accidente. Sabes perfectamente a lo que me refiero. Especialmente, no seas masoquista y borra aquellas canciones que haya en tu móvil que te recuerden a esa persona (no sabes lo traicionero que es el dichoso aparatito cuando menos te lo esperas, ahí sin previo aviso ni anestesia). Ponte “Fire” de BTS (aquí está, para que ni tengas que perder tu tiempo en buscarla… qué buena soy =P https://www.youtube.com/watch?v=ALj5MKjy2BU) o “Bang bang bang” de Big Bang (venga, y aquí el otro enlace: https://www.youtube.com/watch?v=2ips2mM7Zqw), ponte a bailar y echa las penas a un lado.
- Disfruta del azúcar. Como decía Celia Cruz: ¡Aaazúcar~! Come chocolate, 호떡, chucherías, dulces de cualquier tipo y, en general, cosas con azúcar para aumentar la glucosa en tu cerebro o lo que el cuerpo te pida a través de antojos. Piensa que estás de bajón y tu cuerpo es sabio, así que te recomendará aquello que tienes que ingerir para que tu cabecita funcione a su mayor rendimiento y pueda brindarte una ayuda extra. ¡A la mierda las cosas verdes! Dale a tu cuerpo (alegría Macarena) lo que te pide y consiéntete un poco sin remordimientos.
- Duerme mucho. Mientras duermes no eres un ser pensante, sino “soñante”, y te permites tener un descanso de una realidad que será difícil por una temporada. Además, tienes que dormir porque, como dice Estopa, “dormir no gasta, sale mucho más barato”. Ahorras y repones energía, 2x1.
- Haz un maratón de videojuegos. Si te gustan los videojuegos, tienes una opción más que el resto de los mortales: ponte tu videojuego favorito y olvídate del mundo. Juega durante todo el día, dalo todo, pásate todas las misiones que puedas y logra las mejores puntuaciones que hayas conseguido nunca. Juega de forma intensiva. Haz un maratón empezando por la mañana y dura todo lo que puedas, hasta que el cuerpo aguante. Cuanto más nos adentramos en la edad adulta menos tiempo tenemos, tristemente, para pequeños placeres de la vida como este y nos puede servir de gran ayuda por ayudarnos a evadirnos de la realidad y por todos los beneficios que supone jugar a los videojuegos, además de la diversión, así que ¡a jugar!
- Reza o habla en voz alta. Estos momentos en los que necesitamos respuestas más que nunca es cuando considero que algo como rezar puede ser muy beneficioso, si se tiene esa creencia. En caso de ser ateo o no estar seguro de tus creencias (como es mi caso), siempre puedes hablar en voz alta con la esperanza de que quien sea de por ahí te oiga… y aunque no lo llegara a hacer nadie, a veces manifestarse en voz alta y creer que alguien nos está escuchando ayuda y podemos ver más cosas, ya que, en el fondo, estamos hablando con nosotras mismas (que también hace falta). Personalmente, no estoy muy segura de lo que creo o, mejor dicho, soy una persona demasiado racional como para poder creer, pero me resisto a pensar que no hay nada más allá porque entonces vaya sinsentido y mierda de vida, ¿no? Así que yo siempre quiero pensar que hay alguien, llámesele fuerzas sutiles, espíritus, luz, ángeles, Dios o lo que sea que quiere consolarnos y brindarnos consuelo. Y aunque no hubiera nada rodeándonos, nosotras mismas somos capaces de sentir, aunque sea fabricado de una manera artificial y sin sentido, amor que proviene de dentro de nosotras, así que debemos simplemente tratar de crearnos un universo de pensamientos elevados y positivos una vez hayamos escuchado lo que tenemos que decirnos.
- Escribe o haz algo creativo con tus emociones. Canaliza ese dolor que llevas dentro creando en vez de destruyendo y verás como acabas sintiéndote realizada y orgullosa de tus frutos. Recuerda que así nació este blog ^^
- No finjas ser “superwoman”. Esto es algo que me pasa especialmente a mí y probablemente haya muchas mujeres que siempre tratan de ser más fuertes de lo normal, por lo que tratan de engañarse a sí mismas diciendo que no pasa nada, que es sólo un hombre (como si eso tuviera sentido alguno). Mal. Así sólo estamos contribuyendo a causarnos más dolor al obligarnos a creer que tenemos que ser capaces de recuperarnos a la velocidad de la luz sin un tiempo prudente de “luto” reprimiendo nuestros sentimientos. Y, claro, luego surgen en épocas inapropiadas cicatrices mal cerradas que acaban por derramar sangre por donde pueden. Vamos a permitirnos ser más seres humanos y tener derecho a caer de vez en cuando, siempre y cuando nos levantemos siempre.
- No olvides que estás viviendo TU VIDA. Aunque pensaras, quizá, que tu vida estaba ineludiblemente vinculada a otra persona de la que dependía tu felicidad, nadie más que tú puede vivir las experiencias que tú estás viviendo y tienes que tomar las riendas de tu destino al margen de los baches que encuentres por el camino. Eres la única persona en el mundo que está viviendo tu vida… ¿no te parece algo fascinante? Eres única en este mundo y, cuando te des cuenta de lo increíble que es esto, te querrás más automáticamente. Para ayudarte a interiorizar este mensaje, te recomiendo la canción de Calle 13 “No hay nadie como tú” (aquí está el enlace para que la disfrutes: https://www.youtube.com/watch?v=t0DeJ5HeG8o). Intenta tener una vida feliz sin atormentarte, que sólo tenemos esta, que sepamos, y tú eres el Dios de tu universo. ¿Qué vas a crear?
- No busques sustitutos. Si eres de esas que se lanzan en busca de una persona que sustituya a la otra pensando que un clavo saca otro clavo o vas con la mentalidad de liarte con el primero que pase, párate a pensarlo detenidamente. Quizá no te hayas dado cuenta, pero puedes herir a otra criatura debido a tu falta de claridad mental en estos momentos (que no es que lo hagas conscientemente) y, al final, vas a acabar viviendo una doble ruptura porque, ¿cómo crees que va a terminar todo? Mejor céntrate en desarrollarte personalmente y tómate las cosas con calma, disfrutando también de la soledad (que no es tan mala como la pintan). Date tiempo para recuperarte y, cuando realmente estés bien, sal a buscar a esa persona con todas tus facultades a tope y mostrando todo lo que puedes ofrecer.
- Saca la ira “p’afuera”. Rompe cosas para ayudarte a sacar la furia acumulada en tu interior, como lápices (personalmente, he de reconocer que esto me ha ayudado mucho), fotos o lo que quieras (siempre y cuando no te pongas en peligro ni a ti misma ni a otros, claro está). Grita e, incluso, di palabrotas (está demostrado científicamente que ayuda a aliviar el dolor a través de un efecto analgésico, como puedes leer en estos artículos: http://www.actitudfem.com/entorno/genero/mujeres/las-personas-que-dicen-groserias-son-mas-felices y http://www.bbc.com/mundo/especial/vert_fut/2016/03/160307_vert_beneficios_de_decir_groserias_yv). Haz cualquier cosa que te traiga consuelo tras expulsar lo que llevas dentro y te ayude a desfogar. Un “개새끼” o un “시발” salidos desde el fondo del alma pueden convertirse en tus mejores aliados: ¡úsalos!
- No culpes al país o al idioma. Tu relación es algo que, por mucho que se haya desarrollado en un momento y lugar concretos, pertenece al ámbito privado y particular. El hecho de que no haya funcionado no significa que debas caer en la absurdez de ponerte a montar berrinches culpando a un país o a una lengua (que ni siquiera tienen vida por sí mismos). Tampoco te conviertas en una nube negativa y amargada pensando que nunca vas a encontrar a nadie aquí o que todos son iguales porque sabes que no es algo factible. Todo pasa como, cuando y donde tiene que pasar, sin que nosotros podamos, muchas veces, hacer algo al respecto. No pierdas nunca la fe, ya que probablemente eres joven y nunca es tarde. Mereces a una persona con la que compartir la vida felizmente y, nuevamente, no se trata de buscar culpables en caso de que tarde en venir o de desprender energía negativa. Más bien, visualiza al oppa que quieres que te venga y pídeselo al universo.
- No veas dramas coreanos (o de cualquier país cuyo formato sea similar). No lo hagas, al menos, durante un tiempo. Hablo de los típicos dramas en los que todo gira en torno a la historia de una pareja, de temática romántica. Créeme, lo último que necesitas ahora mismo es ver historias felices de amor. Ese chico guapo y de comportamiento perfecto que no puedes tener, justo ahora que es cuando más vulnerable estás… ¿de verdad hace falta que te explique detalladamente por qué es una mala idea? Como te decía antes, resguárdate en otro tipo de géneros.
- No dramatices con el alcohol. Todas tenemos en la cabeza las típicas escenas de los dramas coreanos en los que, cuando todo va mal, la gente va a los típicos 포차 callejeros a beber como si no hubiera mañana. Eso forma parte de la ficción, no lo olvides y pretendas echarte a beber 소주 o 막걸리. Puede que en ese momento te embriagues y te ayude a abstraerte de ti misma, pero al final va a ser mayor el golpe cuando vuelvas a la realidad… y acabarás con una resaca bastante jodida (especialmente si mezclas ambos). Cambia ese pensamiento por disfrutar de un delicioso té verde latte… todavía te sentirás realizada tomando algo tan típico de la cultura coreana y esta maravillosa bebida sólo podrá traerte disfrute sin consecuencias.
Bueno,
tras esta extensión que parece caracterizarme, sobra decir que, por supuesto,
no tienes que hacerlo todo. He querido compartir todas las ideas que se me han
ocurrido detalladamente para llenar los huecos que otras entradas que he encontrado en Internet hablando sobre el tema no
han podido, según mi punto de vista. Seguro que a ti también se te ocurren
otras cosas que hacer y cada uno tiene que encontrar lo que le funcione, ya que
cada persona es un mundo. De todas formas, ¿qué añadirías? ¿Cuál de todos estos
consejos consideras más útil o te funciona mejor? Me gustaría mucho saber tu
opinión ;)
Si quieres ampliar algo más, ya que seguramente 32 consejos
te habrán sabido a poco, te recomiendo este artículo sobre las fases de una
ruptura y algunos consejillos generales: http://www.elmundo.es/salud/2014/04/09/53443ef7ca474165428b4585.html;
y otro que me ha parecido que tiene un enfoque muy interesante: http://www.psicoactiva.com/blog/como-superar-una-ruptura-sentimental-en-5-pasos/
Y si aún necesitas más, siempre puedes recurrir a WikiHow,
que tiene una entrada hablando sobre esto con ilustraciones gráficas y todo xD http://es.wikihow.com/superar-una-separaci%C3%B3n
Te mando toda mi energía positiva, ganas de que te recuperes
pronto de todo corazón y deseo que te quedes conmigo compartiendo el viaje en
busca de mi oppa, que no deja de ser
el oppa que todas estamos buscando ^^
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu aportación =)